DANIEL MATUL


Traído a colación por
Joan Bernal


Trae a colación a
Gabriela Delgado
Jaime Gamboa
Fabio Víquez
Jenny Álvarez


Vida y milagros
Escritor guatemalteco, con más de 25 años de residir en Costa Rica. En 1995 obtuvo el primer lugar en el Certamen de Poesía de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Nacional “Omar Dengo” (Costa Rica). En el año 1997, fue uno de los ganadores del Premio Iberoamericano de Poesía “Opera Prima” (España). En el 2005 obtuvo en segundo lugar del Premio Internacional de Poesía “María del Villar”, Navarra, España. En el 2009, recibió el Premio Único de Poesía de los Juegos Florales Hispanoamericanos, Quetzaltenango, Guatemala. Ha publicado Efectos Secundarios, (Editorial de la Universidad de Costa Rica, 2008) y Noche de Ronda (Premio Juegos Florales, 2009). Es profesor en la Escuela de Ciencias Políticas de la Universidad de Costa Rica y labora para la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN).


Daniel dixit
"La poesía es un gato que un buen día, sin saber cómo, ni cuándo, aparece en la casa. No atrapa ratones, al contrario, les perdona la vida. Se duerme en tu cama, se sube a la mesa, se escapa en la noche. Finalmente, cuando por fin te tiene confianza, se enreda en tus piernas con su cola de humo."


Poemas


I

No dejes que el mar te deje sin aliento.
Observa la ternura de la arena, la calma de su orilla.


II

Una herida en silencio,
no es igual a otra que canta.
La primera, todavía recuerda.
La segunda, ya perdonó.


III

El zanate distingue
piedra de honda.
Es por eso, que no siempre huye.


IV

No es el grano el que recibe la lluvia,
tampoco la tierra. Si no este viejo comal,
donde caliento la cena y la esperanza.


V

La nobleza de la leña
cuando la parte el hacha;
cuando se entrega al fuego.
Cuando pongo el comal
y su memoria es humo.




OTRA LUZ

La autoridad de la luz, que ahora me alumbra mientras escribo, no llegará más allá de la cinco y media. Cuando se apague, escribiré a ciegas. Otra luz conducirá mi mano, otra mano escribirá el poema.




TRADUCCIONES

I

Tu boca es el camino que une las aldeas del sol. Tu lengua, el viento que vuela entre los tejados.


II

Tu sombra se para al lado del patojo que fui. La abuela me ponía un trapito rojo en el cuello. El espanto me miraba de lejos; la abuela dormía tranquila.


III

Nuestro amor siempre fue un árbol después de la lluvia. Le gente decía: tan lleno de lágrimas. Nosotros, más ingenuos, jugábamos debajo y jalábamos sus ramas para mojarnos.


IV

El chucherío fuera de la casa anunciaba la temporada de celo. Ojala así estuvieran los poemas, en las afueras de mi casa.


CANCIÓN DE CUNA PARA UN NIÑO ENFERMO

Ri jäb ri jáb ri jáb; nuben jani'la jáb. Deja que las piedras duerman en el camino. Ri jäb ri jáb ri jáb; nuben jani'la jáb. Deja que los chuchos, se refugien en la puerta. Ri jäb ri jáb ri jáb; nuben jani'la jáb. Deja que los loros se posen en mi alma. Ri jäb ri jáb ri jáb; nuben jani'la jáb. No dejes que el tejado se hunda esta noche. No permitas que el patojo se marche con tu canto.


VI

Tu piel le envía cartas al sol, que se queman en el aire. Cartas jamás leídas. Por eso, cuando llueve, la gente del pueblo sale y recoge tus cartas en toneles o palanganas. Son la memoria de un ayer que nadie leyó.


CANCIÓN DE AMOR ENTRE COYOTES

Cada vez que llega la noche, encuentro a los coyotes amando. Aman el aroma de las flores cuando se tiran en el pasto. Se llevan entre sus patas al poema, al olvido. Entran a los gallineros, despiertan al vecindario y pelean contra los chuchos del invierno.